Dos factores pueden aumentar a la larga el precio “real” de una minipiscina y hacer que sea un placer muy caro: la calefacción y el filtrado. Mientras que los gastos de filtrado pueden disminuir a través de la flexible situación actual regulando el ciclo de filtrado, para la disminución de los gastos de calefacción no solo es necesario tener un sistema de calefacción inteligente y económico sino también un buen aislamiento para que una vez alcanzada la temperatura del agua no se vuelva a enfriar.
El mejor aislamiento es el llamado triple-aislamiento que equipa con una capa aislante la parte posterior de la bañera, las partes interiores del revestimiento y la base. La cámara de aire que se encuentra entre estas capas aislantes mantiene el calor de las bombas y al mismo tiempo actúa como otra capa de aislamiento.
Otro concepto es la espumación completa de la zona interior de la minipiscina. Sin embargo, las desventajas de este aislante térmico serán obviamente si por ejemplo se quiere cambiar un surtidor que se ha vuelto permeable.
La pérdida de temperatura de la superficie del agua puede protegerse mediante el uso de una cubierta térmica. Una cubierta de este tipo tiene 10cm. de ancho, es muy estable y se puede plegar por el centro (para una repartición más cómoda). Junto al aislamiento térmico la cubierta protege el agua del spa contra la suciedad.
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